Norma Trujillo Báez
La Jornada
El Estado debe hacerse responsable de la muerte de 3 compañeros y los 43 desaparecidos, “da coraje y rabia que nos vean como pobres, queremos una educación que nos enseñe a aprender y no a obedecer”, dijo Luis Ángel, estudiante de la escuela normal rural “Raúl Isidro Burgos”, quien denunció que aún siguen siendo reprimidos por la policía federal en Guerrero.
En entrevista el estudiante denunció que los estudiantes de escuela “Raúl Isidro Birgos” siguen siendo hostigados por la policía, el gobierno quiere que los normalistas de Ayotzinapa se queden callados, “que no digamos la verdad, quiere que callemos, y como no aceptamos sigue el acoso por parte de la policía, la policía nos sigue tomando fotos, incluso la policía que se encuentra en Guerrero sólo quiere intimidarnos, no está haciendo su trabajo, por el contrario nos dice que nosotros somos los culpables pero estamos siendo desalojados y golpeados por la policía.
”Quieren incluso comprarnos porque nos ofrecieron dinero por cada compañero, pero nosotros tenemos dignidad, no nos vamos a vender, y hacemos responsables al gobierno y a la policía del municipio y federal, de cualquier cosa que nos pase, porque salimos a manifestarnos pacíficamente”.
También la represión se da con la aportación económica a la escuela normal, “siempre que nos manifestamos o que estamos dentro de un movimiento el gobierno no se hace responsable de nosotros, porque ellos no van a tener una lucha que es en contra de ellos, nos cortan la ración, ahora estamos sobreviviendo gracias al apoyo que nos llevan”.
La ayuda la están recibiendo de otros estados del país y de otros países, “es así como estamos en la lucha, colectivos, ya llegaron Médicos Sin Fronteras, diferentes países están apoyando, de España, Alemania, Colombia, hay colectivos, los países nos han apoyado”.
El gobierno ya sabe quiénes son, quienes están involucrados en la desaparición de los 43 estudiantes, ya sabían del alcalde (José Luis Abarca) y sus vínculos con el crimen organizado, “el 26 de septiembre salimos a botear, éramos como 80 compañeros de primero y segundo grado ya se disponía a irse para la normal, los policías no tenían ningún motivo para atacarlos. Da coraje que nos vean como pobres, porque para el Estado sólo representamos una fuga de dinero”.
El también miembro de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México, dijo que es necesario el boteo porque no tienen ni para mantenerse.