Virgilio Sánchez
Reforma (Foto: En la ceremonia de inauguración del parador de Yanhuitlán, Felipe Calderón recorrió las instalaciones acompañado del ex «Gobernador» Ulises Ruiz. Imagen de archivo / Reforma(
Oaxaca, México (13 julio 2014).- Los «gobiernos» federal y estatal invirtieron más de 160 millones de pesos en construcciones que sólo sirvieron un día: el de su inauguración.
En 2008, el entonces usurpador Felipe Calderón y Ulises Ruiz, quien era «Gobernador», inauguraron, en diferentes fechas, una planta de tratamiento de aguas residuales para la zona metropolitana de Oaxaca y un parador turístico.
Esta última obra está a un costado del templo dominico de Santo Domingo Yanhuitlán.
La primera requirió una inversión de 139 millones de pesos, pero no opera porque está inconclusa una red de recolección en la capital del Estado y en los municipios conurbados ni siquiera existe.
Personal de la Comisión Estatal del Agua informó que la red de drenaje no llega hasta la tratadora, la cual está situada a un costado del aeropuerto de la capital del estado, en la comunidad de La Raya, Municipio de Santa Cruz Xoxocotlán.
El lugar está abandonado, aunque las instalaciones están cercadas con malla ciclónica.
Actualmente, las aguas residuales de la Ciudad de Oaxaca y de los municipios conurbados son descargadas en los ríos Salado y Atoyac.
Además, las instalaciones de la planta ya tienen humedad y los equipos empiezan a oxidarse.
En la región de la Mixteca, la Federación y el Gobierno de oaxaqueño gastaron más de 30 millones de pesos en la construcción de dos paradores turísticos para incentivar la «Ruta Dominica», llamada así por la cercanía de los templos dominicos del siglo XVI.
En cada inmueble se habilitaron espacios para restaurantes, tiendas de artesanías, cabañas de alojamiento, sucursales bancarias, entre otras.
En el Municipio de Santo Domingo Yanhuitlán, el ex Gobernador Ruiz levantó el primero de estos paradores con una inversión superior a los 20 millones de pesos.
El día de su apertura, el 30 de junio de 2008, Ruiz simuló la operación del parador, puso en funcionamiento todos los espacios. Ese día, Calderón recorrió la tienda de artesanías y el restaurante, pero al concluir la ceremonia, el Gobierno de Oaxaca desmanteló el lugar.
REFORMA documentó que el mobiliario fue empaquetado nuevamente y arrinconado en el sitio que debía funcionar como restaurante.
En 2008 a pesar de que el sitio estaba abandonado, Ruiz aprobó la construcción en el patio trasero del parador un par de cabañas.
El vigilante del lugar manifestó que el edificio no cuenta con servicio de energía eléctrica ni agua potable.
El parador turístico sólo muestra una manta para promover grupos musicales para los bailes de la región. La instalación está rodeada de matorrales, y el acceso principal se encuentra encadenado.
El ex Mandatario replicó el modelo turístico con el parador en el Municipio de Coixtlahuaca, donde se ubica otro ex convento dominico, en el cual invirtió más de 10 millones de pesos.
El edificio está cercado, y a diferencia del parador de Yanhuitlán, éste carece de agua potable y electricidad. Incluso se puede observar que no ha sido colocado el medidor de la compañía encargada del servicio.
La instalación tiene una acumulación de tierra y muros trasminados por el agua.
El Alcalde de Coixtlahuaca, Raúl López Carrizosa, afirmó que no tienen recursos para poner en funcionamiento el parador, y denunció que el Gobierno de Oaxaca tampoco ha manifestado interés para reactivarlos.
Ligan a hermano de Ulises
Los «paradores turísticos» de Yanhuitlán y Coixtlahuaca están ligados al arquitecto Víctor Hugo Ruiz Ortiz, hermano de Ulises Ruiz.
Los reportes de contratos de obra por adjudicación directa otorgados en los años 2008 y 2009 indican que las empresas encargadas de la construcción fueron Consorcio Restaurador del Patrimonio Cultural S.A. de C.V., Grupo Empresarial Oaxes S.A. de C.V. y Nexicho Asociados S.A. de C.V..
Estas empresas tenían el mismo domicilio fiscal, en la calle Nayarit 102, en el fraccionamiento residencial San Felipe del Agua, zona de mayor plusvalía de la capital oaxaqueña.
El equipo de campaña de Gabino Cué, en el proceso electoral de 2010, presentó documentos en los estaba asentado que el propietario de esas constructoras era Fabián Montes Serra, quien arrendaba las oficinas a Víctor Hugo Ruiz.
En 2009, los trabajadores que cuidaban el parador de Yanhuitlán informaron a REFORMA que el Víctor Hugo asistía personalmente a supervisar el avance de la construcción.