Pide el Cecop parar ataques contra alumnos y luchadores.
FRANCISCA MEZA CARRANZA
La Jornada
Organizaciones sociales se sumaron a la condena del ataque sufrido por estudiantes de la normal rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, en Iguala y exigieron al gobierno que ponga alto a la violencia en la entidad; asimismo, calificaron las muertes como crímenes de Estado.
Por vía telefónica, el vocero del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la presa La Parota (Cecop), Felipe Flores Hernández, aseveró que en la entidad ya no hay respeto para nadie y exigió que cesen los ataques a luchadores sociales.
“Lo que estamos pidiendo es que cesen los asesinatos de estudiantes y luchadores sociales; no podemos permitir que se siga dando toda esta violencia; tenemos que pedirle, exigirle, al gobierno que ya le ponga un alto; de plano estamos viviendo en un estado que no hay respeto para nadie”, expresó.
No obstante, dijo que no aún no se puede culpar a nadie porque no está claro de dónde llegaron las balas.
“Más que nada, primero se tienen que investigar los hechos para saber qué paso, de dónde vino la agresión, quién mando; no es coincidencia, pero sí tenemos que tener claridad de dónde vino y por quién vino; no podemos echarle la culpa a nadie hasta no saber la realidad, quiénes son los responsables”, dijo.
En tanto, en un comunicado conjunto, el Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco) y el Comité de Familiares y Amigos de Secuestrados, Desaparecidos y Asesinados en Guerrero, expresaron que los gobiernos municipal y estatal están involucrados en esos crímenes por acción, omisión y aquiescencia.
Expresaron que con los hechos las policías municipal y estatal actuaron con dolo, con lo que ratificaron su vocación represiva, autoritaria y criminal, además de que reafirman que están hechas para contener movimientos sociales y asesinar estudiantes, y no para dar seguridad.
Llamaron al pueblo de Guerrero y a sus organizaciones a manifestar su apoyo y respaldo a los estudiantes y a exigir justicia para que los crímenes de Estado no queden impunes.
“Repudiamos el asesinato de los tres estudiantes, quienes murieron con la convicción de la defensa de sus derechos y los de sus compañeros, al igual de los estudiantes que resultaron heridos y los que se encuentran privados injustamente de su libertad. Estas agresiones las sentimos en carne propia y les recordamos a los gobiernos estatal, federal y municipal que si nos tocan a uno, nos tocan a todos”, expresaron.
