Patricia Méndez
E-Consulta
La empresa La Peninsular, propiedad de la familia Hank Rhon, se perfila para obtener el contrato de construcción del Museo Internacional Barroco a través de un consorcio en el que sumó a tres firmas más, las únicas que quedan en el concurso de licitación abierto por el gobierno del estado de Puebla.
Este contrato se sumaría a los activos de los Hank en Puebla, entre los que también destacan su participación en la concesión del servicio de agua potable, a través del Grupo Financiero Interacciones, con quien además el estado tiene una deuda por 3 mil 252 millones de pesos desde el sexenio pasado.
Adicionalmente destaca la posible participación de La Peninsular en los trabajos de construcción del segundo piso de la autopista México-Puebla, a cargo de la firma OHL y Pinfra.
Cabe señalar que el fallo del contrato se emitirá el próximo 27 de agosto, fecha en la que la Secretaría de Finanzas y Administración definirá si entrega la obra a este consorcio.
Los Hank, a un paso del Barroco
Toda vez que desertaron la mayoría de las empresas que participaban en el concurso de licitación que el gobierno estatal abrió para elegir a la firma que se encargará de la construcción del MIB, La Peninsular Compañía Constructora integró un consorcio con las empresas restantes, para pelear como única candidata por el proyecto de más de mil 400 millones de pesos.
De acuerdo con el acta de presentación de propuestas técnicas del concurso número SFA-CP-APP-2014/002, la empresa Marhnos Turismo desertó del concurso a través de un oficio enviado a la administración estatal, así como las firmas Abengoa e Ingeniería, e Ingeniería y Desarrollo Inmobiliario de México, quienes no se presentaron a dicha etapa del procedimiento.
En tanto, La Peninsular se asoció con Operadora y Administración Técnica S.A. de C.V., Promotora de Cultura Yaxche S.A. de C.V., Concretos y Obra Civil del Pacífico S.A. de C.V., para convertirse en el único grupo interesado en el proyecto.
Además de la construcción, la empresa ganadora se hará cargo de la operación del museo por 23 años y cuatro meses, ya que la obra forma parte de un Proyecto de Prestación de Servicios (PPS).
La Peninsular forma parte del Grupo Hermes Infraestructura, que es propiedad del empresario Carlos Hank Rohn.
La concesión del Soapap, el negocio más reciente
El negocio más reciente que la familia Hank concretó en Puebla fue la concesión del Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (Soapap), a través del Grupo Financiero Interacciones.
Dicho grupo financió recursos estimados por 1 mil 400 millones de pesos para pagar una contraprestación que el gobierno del estado solicitó al consorcio Concesiones Integrales a cambio de la concesión por 30 años de la administración del servicio de agua potable en Puebla.
El tres de julio pasado, la periodista Bárbara Anderson reveló que el empresario Carlos Hank González es quien preside el fideicomiso bancario que Concesiones Integrales creó para administrar el Soapap.
Puebla debe a los Hank más de 3 mil mdp
El gobierno del estado contrató en el sexenio anterior una línea de crédito por 3 mil 350 millones de pesos –de la que hoy restan 3 mil 252- con un vencimiento hasta el año 2033, con el Banco Interacciones, que forma parte del grupo financiero del mismo nombre, propiedad de la familia Hank.
Asimismo, debe recordarse que el gobierno estatal entregó una concesión por 30 años a la empresa española OHL para la construcción y operación del segundo piso de la autopista México-Puebla, la cual, recientemente difundió en medios locales que podría solicitar la participación de la firma La Peninsular a través de un consorcio con la empresa Proyectos Viales de México.
