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El niño José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo falleció la tarde de este sábado a consecuencia de un «paro cardiaco», después de que el viernes los médicos que lo atendían le diagnosticaron muerte encefálica.
El menor se encontraba hospitalizado desde el pasado 9 de julio, cuando sufrió una herida en la cabeza durante el operativo de policías estatales para desalojar a habitantes de San Bernardino Chalchihuapan que bloquearon la autopista Puebla-Atlixco en demanda de que retornara el servicio del Registro Civil a la junta auxiliar.
Integrantes de la Coordinación Estatal para la Defensa de la Identidad de los Pueblos (Cedip), que acompañaban a la madre del menor, Elia Tamayo, confirmaron el deceso.
Aún por la mañana de este sábado el neurólogo Luis Felipe Loría Rosado hizo una valoración médica del menor a petición de los propios familiares, para tener una versión adicional a la del personal que lo atendía en el nosocomio público .
El especialista ratificó que el menor ya no presentaba signos de actividad cerebral y recomendó que la familia que permitiera desconectarlo de los aparatos.
Sin embargo tanto la madre como sus allegados optaron por que el niño continuara asistido en el nosocomio, ya que además existía un amparo “por derecho a la vida” para que los médicos no lo desconectaran.
La noche de este sábado el gobierno del estado confirmó el deceso del menor José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo y reiteró “su disposición de brindar el apoyo que sea requerido por sus familiares”.
Asimismo ratificó “su compromiso de continuar con las investigaciones judiciales hasta sus últimas consecuencias y alcanzar la justicia que demandamos los poblanos”.
Cabe señalar que el viernes el director del Hospital General del Sur, José Antonio Martínez García, confirmó la muerte encefálica de Luis Alberto Tehuatlie, tras efectuarle pruebas de encefalograma y de ultrasonido Doppler cerebral .
En ellas se detectó la ausencia completa y permanente de conciencia; ausencia permanente de respiración espontánea; ausencia de los reflejos del tallo cerebral, manifestado por arreflexia pupilar; ausencia de movimientos oculares en pruebas vestibulares; ausencia de respuesta a estímulos nocioceptivos.
El médico dijo que el pasado 15 de julio –seis días después de que sufrió la lesión– al menor le fue practicado un encefalograma en donde aún presentaba actividad cerebral.
