- Hubo omisiones graves en la investigación de la CNDH, sostiene el funcionario
- Considera que es necesario esclarecer la verdadera responsabilidad y castigar a los culpables
FRANCISCA MEZA CARRANZA
La Jornada
El secretario del Trabajo del gobierno del estado, Alberto López Rosas, dijo coincidir en que el asesinato de los dos normalistas de Ayotzinapa en diciembre de 2011, sea reabierto para que se esclarezca y haya justicia.
El jueves, en un acto en Acapulco, el gobernador Ángel Aguirre Rivero dijo que solicitaría que se le dé continuidad al asesinato de los jóvenes mientras protestaban.
Al respecto, el funcionario estatal, quien fue procurador general durante los hechos ocurridos en Chilpancingo, consideró que es necesario que se reabra el caso para que se haga justicia.
El ex procurador reiteró que hubo “omisiones graves” en la investigación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), que investigó los hechos como su primer caso con la facultad de atracción.
“Creo que aquí hubo omisiones del presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Raúl Plascencia, muy graves, que atentaron contra derechos humanos de muchas personas”, dijo.
Asimismo, señaló que también que hubo violaciones de Genaro García Luna, cuando era el titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal, y no se hizo nada al respecto.
“La actitud de García Luna fue el factor determinante de manipulación de esa investigación, y creo que hay impunidad en Guerrero en esos hechos de las autoridades federales de su momento”, aseveró.
López Rosas remarcó que es necesario para el bien del estado que se reabra el caso para que se esclarezca la verdadera responsabilidad, se castigue a los verdaderos culpables y haya justicia.
Luego de los hechos, el entonces procurador insistió en responsabilizar a los agentes de la Policía Federal de haber disparado contra los manifestantes.