Armando Guzmán
Proceso
VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- El líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, reiteró que no conoce ni recuerda haberse tomado fotos con el exalcalde perredista de Iguala, Guerrero, José Luis Abarca, prófugo de la justicia por la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa.
“Lo que pasa es que ahora me quieren involucrar en este asunto los de la mafia del poder. Les molestó mucho lo que plantee en el Zócalo: que debería renunciar Peña Nieto”, dijo.
A partir de esa declaración, añadió, se lanzaron “muy fuerte” el presidente nacional del PRI, César Camacho, además de Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa, y ahora –agregó– sólo espera que se lancen en su contra Carlos Salinas y Vicente Fox.
En entrevista vía telefónica para una estación de radio local, el líder de Morena señaló hasta esta mañana no había visto las fotos que circulan en las redes sociales donde aparece junto al exalcalde José Luis Abarca y su esposa, vestidos con camisetas amarillas, en un acto de campaña.
“Yo conozco a muchísima gente, ando constantemente recorriendo el país, me tomo fotos con todo mundo, todo el que me lo pide, pero en este caso no conozco al señor Abarca y tampoco recuerdo que me haya retratado con él”, aseguró.
Señaló que cuando un político de Izquierda “anda en malos pasos”, por lo general ya no lo busca, se aleja de él, y mencionó como ejemplo a Graco Ramírez, que apenas entró como gobernador de Morelos, se deslindó de él y no lo vio más.
En el caso de Abarca, sostuvo que no lo conoce y que tampoco tuvo nada que ver con su designación como candidato a la alcaldía de Iguala.
“Nunca he establecido ninguna relación con él. Además, lo más importante es que yo no establezco relaciones de complicidad con nadie. Entonces, quieren ahora estos corruptos de la mafia del poder involucrarme”, insistió.
Sobre lo dicho por el exdirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, de que fue advertido sobre los antecedentes de Abarca, el excandidato presidencial replicó que cuando anda en campaña le entregan documentos de todo tipo y cuando hay elecciones “se acusan unos a otros”, pero él nunca se mete.
Recordó que en ese entonces, preocupado por lo mismo, le pidió a Ricardo Monreal, que era coordinador de campaña presidencial, que pidiera informes a la Procuraduría General de la República (PGR) sobre candidatos a diputados federales y a gobernadores, ya que no podía meterse a solicitar información sobre presidentes municipales.
“Me acuerdo que le pedí que fuera a la Procuraduría, que viera los nombres para que se evitaran esas cosas, pero hasta ahí”, indicó.
En relación a la acusación de demagogo que también le imputa Jesús Zambrano, por decir que en 2010 buscó distanciarse del PRD, pero en 2012 fue su candidato presidencial, López Obrador explicó que la prueba es que en algunos estados apoyó a candidatos del PT y de Convergencia, ahora Movimiento Ciudadano, y que cuando querían hacer alianza con el PAN en el Estado de México, dijo que no.
Luego, agregó, vino la candidatura de Ángel Aguirre Rivero para Guerrero, y propuso apoyar su campaña si firmaba un compromiso para impulsar el desarrollo económico y social en el estado, pero no quiso firmarlo, “entonces no fui a la campaña de Aguirre por esa razón”.
Según López Obrador, el culpable de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa es “directamente” el presidente Enrique Peña Nieto, quien primero, dijo, debe resolver el caso y castigar a los autores intelectuales y materiales para que no haya impunidad.
Y en segundo lugar, añadió, cambiar la política que llevó a todo esto, enfrentando la corrupción “que el mismo Peña Nieto está promoviendo”.
El exjefe de Gobierno del Distrito Federal calificó de impresionante la forma en que están entregando contratos de obras a cercanos y socios del presidente de la República en autopistas, segundos pisos, el aeropuerto y los trenes.
“Acaban de dar a conocer que una empresa ganó la licitación para construir el tren de Querétaro a la Ciudad de México, 55 mil millones de pesos de presupuesto público, fue la única empresa que participó. Resulta que en esta empresa está el compadre de Peña y director de Excélsior”, denunció.
Mencionó que en el caso del nuevo aeropuerto se habla de una inversión de 160 mil millones de pesos, “también para contratistas vinculados a Peña”, y reprochó de nueva cuenta la adquisición del nuevo avión presidencial, con un costo de siete mil 500 millones de pesos.
“Todo es codicia, corrupción”, machacó, y exigió a Peña Nieto no intervenir en la Suprema Corte, “como lo está haciendo”, para que los ministros permitan que se consulte a los mexicanos sobre la reforma energética.