Por ahí anda la inmobiliaria de Grupo Higa, por supuesto. ¡Qué casualidad!, ¿verdad?
Fernando Gutiérrez
El Economista
Con el fin de incentivar la construcción de vivienda así como evitar que los precios finales de las casas se encarezcan entre 1 y 3%, el secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso, anunció la segunda parte de los estímulos fiscales en beneficio de los desarrolladores, sus proveedores y del sector.
Ante representantes del sector de la vivienda, políticos y banqueros, Videgaray Caso explicó que estos estímulos consisten en que los proveedores de las vivienderas reciban el monto de 100% del Impuesto de Valor Agregado (IVA) causado por la prestación de bienes y servicios a dichas desarrolladoras, de tal manera que estos costos no se trasladen a los constructores así como al precio final de la vivienda.
“La vivienda es un bien que está exento del IVA. Sin embargo, conforme a las recientes resoluciones del Poder Judicial, los servicios contratados a terceros por parte de los constructores de vivienda sí están sujetos a ese impuesto”, expresó el funcionario.
Calculamos, agregó, que aproximadamente evitar ese traslado de IVA reduce o erige un incremento en el precio final de vivienda de entre 1 y 3% a la familia que la adquiere; es decir, la medida es un impacto relevante en el precio de la vivienda que le da certidumbre a la industria y que permite seguir construyendo viviendas.
Entre los prestadores de servicios se encuentran corredores inmobiliarios, valuadores y proveedores de insumos.
Videgaray Caso indicó que este mecanismo tiene dos características especiales: debido a que el estímulo se obtiene en la declaración de impuestos del proveedor, sólo beneficia a los participantes formales de la economía. Además, contiene incentivos muy claros para que dicho beneficio no se utilice en construcciones distintas a la vivienda y que están sujetas al IVA. “Se tiene un debido proceso de certificación para asegurar que no haya un abuso en este mecanismo”, agregó.
El encargado de las finanzas públicas del país recordó que en enero pasado, el Peña Nieto anunció la aplicación de dos mecanismos de relevancia para detonar el impulso en el sector.
El primero consiste en que el pago que realicen las desarrolladoras por concepto del Impuesto Sobre la Renta que obtengan ingresos por ventas a plazos, se base únicamente en el ingreso efectivamente recibido durante el año, en lugar de hacerlo en una sola exposición al principio de la operación, por el precio total.
Además, se estableció un esquema para que las empresas prestadoras de servicios parciales de construcción que tuvieran adeudos en el IVA pudieran regularizarse.
Presume momento del sector
El funcionario destacó el momento que vive el sector, tras un 2012 y 2013 complejos. Las cifras son alentadoras, dijo, la industria de la construcción creció 4.7% anual en enero, el empleo formal en la construcción a febrero creció a 11.6”.
Con datos de la Comisión Nacional de Vivienda, agregó, estamos viendo que el registro de unidades, en inventarios de las desarrolladoras, tanto en construcción como disponibles, creció 35% al cierre del año pasado con respecto al 2013. “Éstas son cifras alentadoras que muestran que las acciones tomadas, por parte no solamente del gobierno de la República sino de los desarrolladores han funcionado”.
Videgaray manifestó que es necesario otorgar certidumbre a las reglas de la vivienda así como continuar con el diálogo con la industria.
Los retos
Por su parte, Jesús Murillo Karam, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, reconoció que uno de los retos futuros del sector es dotar de vivienda a la población altamente mayoritaria en edad laboral.
“Si en la actualidad hay un rezago en la existencia o en la calidad en cerca de 9 millones de hogares, en los próximos siete años serán por lo menos 3.5 millones más: es decir, si no hacemos lo que estamos haciendo, y si no lo incrementamos, vamos a heredar un problema en lugar de resolverlo”, sostuvo
Estos datos, apuntó, nos reflejan la necesidad de encontrar los mecanismos para propiciar, alentar, apoyar a un sector cuya importancia en la calidad de vida, en la creación de oportunidades e incluso en la paz social, se convierte en prioritario.
Constructores avalan medidas
El anuncio de nuevos estímulos fiscales a los proveedores de los desarrolladores de vivienda es bien visto, ya que evita la limitación de la vivienda social y genera certidumbre a la industria, según Fernando Abusaid Quinard, presidente nacional de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi).
Durante su discurso en el marco de la presentación de estos nuevos estímulos, Abusaid Quinard destacó que con esta medida se mantiene el objetivo de conservar los costos de la vivienda bajos, además de facilitar el acceso a viviendas dignas y la atención al rezago habitacional.
“Vivimos momentos trascendentales después de atravesar por una etapa de transición derivada del cambio de la política nacional de vivienda. Hoy nos encontramos en una etapa de consolidación y crecimiento sólido, claro y medible”, expresó el representante de los constructores de vivienda.
Abusaid Quinard acotó que en la actualidad las casas que desarrollan los afiliados a la Canadevi cuentan con un espacio mínimo de 44 metros cuadrados y dos recámaras: “El porcentaje de vivienda vertical lo aumentamos de 8% a más de 38 por ciento”.
“En la actualidad, la industria de la vivienda tiene un valor de mercado superior a 350,000 millones de pesos y un gran potencial a futuro, puesto que en los próximos 10 años se va a formar la mayor cantidad de hogares en la historia del país”, expresó el directivo.
El presidente de la Canadevi afirmó que gracias al trabajo realizado Infonavit y el Fondo de Vivienda del ISSSTE, la industria ha repuntado y tiene espacio para nuevas empresas que buscan participar en el mercado de valores.