Redacción Vanguardia
Saltillo, Coahuila. Cuando Jorge Galo Medina Torres estuvo al frente de la Universidad Antonio Narro, se creó un órgano “fantasma” mediante el cual se desviaron recursos y después desapareció, según constan documentos en poder de VANGUARDIA.
Entre los días 1 de agosto de 2008 y 28 de febrero de 2009, ingresaron 205 millones de pesos a la denominada Unidad de Proyectos Estratégicos, según una auditoría de noviembre de 2012 hecha por el despacho Leal Tijerina y Asociados, y dos estados de cuenta (No. 00548394924) de la universidad.
Parte de esos recursos fueron retirados, casi en su totalidad, al día siguiente de ser depositados.
No obstante, posteriormente, dicha unidad se volvería humo.
Ni los movimientos financieros ni la creación y desaparición de dicha unidad aparecen o se justifican en los informes presentados por el entonces rector Galo Medina, de acuerdo con fuentes de la Narro.
En la página de transparencia de la institución (www.uaaan.mx/transparencia) solo aparecen los primeros informes que van de 2006 a 2007, y 2007 a 2008. Es decir, no están disponibles los años en que se presentó este desvío.
La revisión externa fue solicitada por la propia UAAAN, una vez que Eladio Cornejo Oviedo asumió la Rectoría.
El arqueo muestra que los depósitos hechos hace seis y cinco años corresponden a razones sociales utilizadas por la Secretaría de Finanzas del Gobierno estatal, así como de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Durango.
El reporte presentado a diciembre 31 del 2008 muestra ingresos por 100 millones 75 mil 347 pesos, mientras que en la misma fecha, pero del 2009, los ingresos superan los 105 millones 959 mil 320 mil pesos.
El informe de estas cuentas está avalado por el entonces Rector; Rubén Morán Oñate, contralor general y José Ramón Sosa, contador general. Como responsable del área firma Margarita Carranza Montelongo.
La cuenta previamente citada de Banorte a nombre de la UAAAN, contaba con 205 mil 252 pesos el 31 de julio del 2008. Para el 26 de mes de agosto, habían sido depositados 35 millones de pesos provenientes de la SAGRD. El 27 del mismo mes fueron retirados 30 millones.
Retiros de cantidades menores se hicieron en los siguientes días del mes, hasta que el 29 de septiembre se hizo un depósito por 20 millones de pesos.
Sin que exista registro de algún retiro importante, el 3 de octubre solamente se reflejan 7 millones de pesos de saldo en la misma cuenta, día en que se registran dos retiros que suman 15 mil pesos para luego recibir un depósito de 20 millones de pesos más.
La misma tendencia se mantiene ese mes, cuando son hechos pagos de cheques pequeños hasta el 10 de octubre.
Luego, no se presenta actividad hasta el día 26 de noviembre cuando la cuenta ya tiene solamente 9 millones 615 mil 250 pesos.
La Unidad de Proyectos Estratégicos, según fuentes universitarias, solamente existió durante ese periodo, por lo que no hay reportes financieros posteriores a los presentados.
El despacho Leal Tijerina y Asociados, concluye que el destino de los recursos no pudo determinarse pues no existen los documentos que lo avalen.
Esa información nunca fue proporcionada a pesar que se indicó que los documentos podían ser solicitados a la Contraloría de la Antonio Narro.
Aleteo de buitres
Revela auditoría que en la pasada administración operó un órgano sin objetivos ni ejercicio financiero claros
Existen antecedentes sobre el presunto desvío de recursos de la supuesta “unidad fantasma”.
En 2011, se señaló que Jorge Galo Medina dejó la Rectoría de la Universidad Agraria con un faltante de 200 mdp.
El 25 de mayo, el actual rector, Eladio Cornejo, dijo que la deuda se arrastraba en los fondos de Vivienda, del Ahorro y de Pensiones porque no se pagaron impuestos.
Públicamente, Medina ha señalado que en la papelería que entregó no registró déficit.
En 2013 se dio a conocer que, según la auditoría de desempeño institucional 11-4-99-MGH-06-0403 que la Auditoría Superior de la Federación realizó sobre el ejercicio fiscal de 2011, se registró un sobreejercicio de 87.5 mdp.
Sin embargo, la institución respondió que este dinero se empleó en pagar deudas atrasadas.