¿Alguien puede creerles algo a estos farsantes criminales?
Verónica Espinosa
Proceso
GUANAJUATO, Gto., (apro).- La PGJE ratificó que, de acuerdo con el avance de las investigaciones sobre la muerte del estudiante Ricardo de Jesús Esparza Villegas, éste falleció al caer cuando trepaba por el muro de la casa del callejón de Peña Grande, entre las cinco y las ocho de la mañana del domingo 19, sin que aún pueda precisar o aclarar cómo o por qué llegó hasta ese lugar.
“No puedo decir que fue un accidente o que intervino una tercera persona, no lo sé”, señaló el procurador Carlos Zamarripa en conferencia de prensa, tras reunirse con los padres y familiares del joven estudiante del Centro Universitario de la UdG Lagos en las instalaciones de la PGJE.
“No podemos decir nada”, comentaron los padres y la hermana de Ricardo de Jesús, al salir de la reunión en la oficina del procurador, evidentemente consternados y con lágrimas en los ojos.
En la conferencia, el procurador dijo que la investigación consignada en la carpeta 30731/2014 continúa abierta; que no puede afirmar de manera determinante que la caída de Ricardo fue accidental o que pudieron intervenir terceras personas.
También subrayó que el joven nunca fue detenido por agentes de policía.
No obstante, en los fragmentos de videos que fueron mostrados se aprecia cómo Ricardo de Jesús fue abordado a las 6:59 de la tarde por elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del estado, las FSPE, cuando se encontraba en la plazuela del Ropero, en el centro de la ciudad, después de haberse dirigido a la plaza del Hinojo a orinar en la entrada a un callejón.
El procurador confirmó que fueron elementos de las FSPE quienes se encontraban en el lugar en operativo del Cervantino, y que fueron notificados por la propietaria de la casa de que el estudiante había orinado afuera de la misma.
En el video se observa cuando Ricardo y los agentes regresan a la plazuela del Ropero instantes después de que lo llevaron ante la propietaria de la casa, “para que le ofreciera disculpas, lo cual hizo, y después de eso Ricardo se queda en la plaza con tres amigos, con los cuales, de acuerdo con las grabaciones, estuvo en ese lugar cerca de tres horas.
Acompañado por el secretario de Seguridad Pública del estado (de quien dependen las FSPE) Álvar Cabeza de Vaca, Zamarripa explicó que los videos fueron obtenidos de cámaras de Seguridad Pública Municipal, de algunos particulares y de propietarios de negocios con el fin de presentar una línea de tiempo de los hechos, además de que se recabaron declaraciones de tres guías de turistas que se encontraban en la plaza, de otros testigos y de dos elementos de las FSPE que habrían abordado a Ricardo de Jesús para obligarlo a que se disculpara con los residentes.
El otro momento captado por las cámaras de video ocurre a las 4:49 de la madrugada del domingo 19, cuando Ricardo, quien vestía un pantalón color beige y una chamarra roja, camina hacia la calle Sangre de Cristo, a la altura de un estacionamiento, mientras habla por teléfono. El joven va solo.
La calle Sangre de Cristo conduce al jardín Embajadoras, y metros más delante de éste, se ubica el acceso al callejón de Peña Grande, donde horas más tarde el muchacho fue encontrado muerto por una de las jóvenes que rentan la casa del número 28, la única que se encontraba en la mañana del domingo en la vivienda y quien declaró que no escuchó ningún ruido.
Aunque ofreció un “recorrido virtual” recreando el camino que pudo haber seguido Ricardo hasta el callejón de Peña Grande, el procurador dijo que aún se están revisando un total de 768 horas de video obtenidas de 60 cámaras en distintos puntos del camino, por lo que aún no podía precisar las circunstancias en que el muchacho originario de Zapopan llegó a la casa donde fue encontrado muerto.
En la conferencia, el perito forense Francisco Chao narró que, según las pruebas encontradas en la casa y en el cuerpo del muchacho, éste habría trepado por el muro de la casa y que, a una altura de tres metros, mientras se sostenía del “tubo de venteo” del bóiler, cayó al patio.
Mostró las huellas de la pintura y el óxido del tubo en las manos de Ricardo, y dijo haber encontrado fibras de tela roja y manchas de sangre que corresponden a la del joven en la parte superior del bóiler, así como el tubo del que se sostuvo, el cual quedó doblado por su peso.
Ricardo sufrió un fuerte golpe en el pecho al impactarse contra el bóiler, y posteriormente un impacto en la cabeza al chocar contra el piso, al sufrir traumatismo cráneo-encefálico.
Hasta el momento, dijo Zamarripa, han declarado cinco de los acompañantes de Ricardo, con quienes viajó de Lagos a Guanajuato, a donde llegó alrededor de las cinco de la tarde del sábado, según otro video donde se aprecia a Ricardo con otros tres jóvenes entrando a la central de autobuses para dejar depositadas algunas cosas en el guardaequipaje.
Cuatro de los estudiantes seguían declarando el día de hoy en las oficinas de la Rectoría de la Universidad de Guadalajara. Hasta el momento, en ninguna de estas declaraciones se precisa en qué momento Ricardo de Jesús llegó a la casa del callejón de Peña Grande y si iba solo o acompañado de alguien más.
“Hemos revisado cerca de cien fragmentos de videos, en los cuales encontramos imágenes donde aparece Ricardo, en algunas solo y en otras acompañado”, además de la declaración de uno de sus compañeros, de que habían estado consumiendo bebidas alcohólicas, dijo Zamarripa.
Sin embargo, hasta el momento, “no tenemos esa información de qué estaba haciendo en ese lugar y cómo llegó ahí… no hay datos del momento en que estaba ahí”, reconoció el procurador.