Jesusa Cervantes
Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- El grupo legislativo para esclarecer el caso Tlatlaya decidió “pedir permiso” al Peña Nieto para que “considere la posibilidad” de invitar a la Corte Penal Internacional (CPI) y al relator especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Sumarias o Arbitrarias de las Naciones Unidas para que venga a México y recaben información.
A través de la recolección de firmas y llevando y trayendo la propuesta a cada oficina de los diputados que conforman el grupo de trabajo, la presidenta de la comisión, Elena Tapia Fonllem, logró finalmente que se avalara el plan de acción y en el que también destaca celebrar audiencias, “por separado, con las víctimas y sus familiares, testigos, vecinos de la zona y colectivos que defienden a los imputados” para recibir sus testimonios y propuestas.
Se aclara que las audiencias podrán ser privadas.
Los diputados aprobaron también trasladarse a la comunidad de San Pedro Limón, Tlatlaya, comunidad mexiquense donde el 30 de junio el Ejército ejecutó a un grupo de civiles, según determinó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Los legisladores buscarán un encuentro con los militares involucrados en los hechos.
Además, intentarán reunirse con las autoridades involucradas, en especial el secretario de la Defensa Nacional; además, pedirán a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas que respalde a víctimas, sobrevivientes y familiares.
Otro acuerdo de la comisión de trabajo fue hablar con los médicos forenses y personal de salud que participaron en las primeras autopsias de los ejecutados y con quienes atendieron al soldado herido.
Finalmente, el grupo de trabajo buscará a los periodistas que han abordado el caso.