Ezequiel Flores Contreras
Proceso (Foto: Basurero en Cocula donde hallaron cenizas y restos humanos / Archivo Proceso)
CHILPANCINGO, Gro., (apro). Portando palas, barretas y picos, familiares de personas desaparecidas desde hace más de cuatro años en la entidad organizaron una búsqueda ciudadana en los cerros de Iguala, donde las autoridades han localizado fosas clandestinas y exhumado una treintena de cadáveres en la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Integrantes de la policía comunitaria en busca de fosas clandestinas en Iguala, Guerrero. Foto: Octavio Gómez
Esta mañana, las víctimas recorrieron las inmediaciones del cerro ubicado en el punto conocido como Pueblo Viejo, donde autoridades ministeriales estatales localizaron 28 cuerpos a principios de octubre.
Acompañados por dirigentes de la autodefensa de la organización denominada Unión de Pueblos y Organizaciones del estado de Guerrero (UPOEG), los familiares de las víctimas recorrieron la zona y excavaron en otros puntos donde presumen que existen más cadáveres en este lugar, en el que las autoridades dejaron de buscar cuerpos a pesar de los indicios que tienen en el sentido de que este lugar fue convertido en un cementerio clandestino.
Posteriormente, un grupo de peritos de la PGR arribó al lugar para colocar cintas amarillas y acordonar el área.
La actitud de las autoridades federales provocó molestia entre las personas que decidieron organizarse para buscar a sus familiares, quienes reprocharon la acción gubernamental.
Este hecho ocurre luego de que el martes 18 decenas de familiares de personas desaparecidas desde hace más de cuatro años acudieron a la convocatoria de la organización Ciencia Forense Ciudadana para integrar una base de datos de víctimas y un banco de ADN en la parroquia de San Gerardo en el centro de Iguala.
El propósito, dijeron, es obligar a las autoridades a identificar los más de 30 cuerpos exhumados en las fosas que han localizado en la zona norte de la entidad, a partir de la búsqueda de los 43 normalistas de Ayotzinapa que siguen desaparecidos.
La semana pasada, asociaciones civiles y la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), convocaron a familiares de personas desaparecidas a integrar un frente común para exigir justicia y que las autoridades asuman su responsabilidad en este caso que tiene en zozobra a cientos de familias.
Los organizadores de la “búsqueda ciudadana” explicaron que primero pretenden integrar una base de datos y posteriormente especialistas procedentes de un laboratorio de Inglaterra vendrán a tomar las pruebas de ADN.
Se trata de atender a las familias que antes de la masacre y desaparición de normalistas de Ayotzinapa habían sido víctimas de la violencia tolerada y fomentada por las autoridades, indicó la activista Julia Alonso.
Por su parte, padres de los 43 normalistas desparecidos de Ayotzinapa también anunciaron que realizaran una búsqueda paralela a la que realizan las autoridades, señaladas de asumir una actitud indolente frente a la tragedia humanitaria que tiene hundida a la entidad en una crisis de gobernabilidad.
El planteamiento será presentado este sábado 22 en la reunión de la Asamblea Nacional Popular (ANP), que se realizará en las instalaciones de la Normal de Ayotzinapa, informaron padres de las victimas tras la reunión que sostuvieron esta tarde con autoridades federales en Chilpancingo.