La pregunta de siempre: ¿qué esperaban de una bola de asesinos usurpadores?
Alonso Urrutia
La Jornada
En el Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), padres de familia y especialistas de diversas instituciones de educación superior censuraron la actuación del gobierno federal para enfrentar el caso de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
Sus hipótesis solo tienden a dar por concluido el caso a fin de inhibir la protesta social que se ha generado no únicamente por los normalistas, sino por los miles de desaparecidos en el país, criticaron.
Congregados para analizar la situación del país a partir de los sucesos en Iguala, la doctora en Sociología, por la UNAM, Elba Teresa Estrada, sostuvo que la estrategia anunciada por el presidente Enrique Peña Nieto es “superfluo, centralista y autoritario”, amén de que no resuelve la situación que impera en el país.
Dijo que se debe investigar el papel del Ejército en Iguala, no sólo por posibles omisiones en su actuar, sino porque, si bien no hay indicios que lo vinculen con la ausencia de los normalistas, en Guerrero hay una historia de desapariciones ligadas a los militares.
María Concepción Tlatenpa, madre del desaparecido Jesús Giovani Rodríguez, criticó la respuesta del gobierno federal, porque no “dice la verdad, nos los han matado 3 veces, solo por desmovilizarnos y al pasar del tiempo generar que la gente que ahora nos apoya, cuestione nuestra exigencia”.
A su vez, Jaime Arzate, otro de los familiares de los desaparecidos condenó la cadena de mentiras que le ha dicho el gobierno para dar por muerto a su hijo y hacernos pasar por gente que sólo quiere alborotar al pueblo.
En su oportunidad, Abel Barrera, del Centro de Derechos Humanos Tlalchinollan, en Tlapa Guerrero, hizo un largo recuento de omisiones en la investigación del gobierno federal y en la actuación de las autoridades municipales, estatales y federales, que han permitido la impunidad en este caso. Destacó que los padres han mantenido su postura firme de “buscar a sus hijos con vida, aún a costa de su propia vida”, pues en este país, “la exigencia de justicia, implica un grave riesgo, de la propia vida incluso”.
Por su parte, el doctor José Joaquín Flores, de la Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco aseguró que la tragedia de Ayotzinapa ha permitido al país darse cuenta sobre las dimensiones de lo que está pasando pues no son 43 sino más de 26 mil los desaparecidos en todo el país.