Benito Jiménez
Reforma
Cd. de México, México (18 diciembre 2014).- Al menos 11 de los 33 Alcaldes de Morelos tendrían un nexo criminal, de acuerdo con fuentes de inteligencia federal.
El 30 por ciento de los Ediles morelenses son investigados por tener familiares, ligas o algún antecedente relacionado con organizaciones de la delincuencia organizada, revelaron los informantes.
Las indagatorias se desprenden de tareas de inteligencia federales en coordinación con el Gobierno del Estado.
Las investigaciones de las autoridades federales también incluyen a síndicos, regidores, diputados locales y policías.
De acuerdo con los reportes, el actual cabecilla del grupo criminal Los Rojos es Santiago Mazari Hernández, «El Carrete», un sujeto de 37 años de edad, sobrino del actual diputado del PT Alfonso Miranda Gallegos.
En carpetas de investigación se indica que «El Carrete» controla a las autoridades de Amacuzac, Puente de Ixtla, Tetecala, Jojutla, Mazatepec y Zacatepec, zonas que se disputa con los Guerreros Unidos.
Ambos grupos sostienen una guerra en Cuernavaca, Xochitepec, Huitzilac, Emiliano Zapata y Temixco.
Además, también se disputan varias zonas en Guerrero. La desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa -de acuerdo con autoridades federales- se registró en este contexto de enfrentamientos.
La ex Primera Dama de Iguala María de los Ángeles Pineda actualmente arraigada por la desaparición de los estudiantes, ha sido acusada de tener vínculos con Guerreros Unidos.
En el caso de Huitzilac, el diagnóstico refiere que es un municipio permeado por el crimen organizado y que sus Alcaldes han sido postulados sucesivamente por los grupos delictivos que operan en la localidad.
El 14 de noviembre, tras el plagio de un taxista, pobladores de Tres Marías, en Huitzilac, bloquearon la autopista México-Cuernavaca.
El Ejecutivo estatal informó que quienes llevaron a cabo el cierre están plenamente identificados como talamontes y traficantes de terrenos. José Alfredo Mancilla, Alcalde de Huitzilac, participó en el bloqueo.
En Amacuzac, el 25 de noviembre, policías hallaron tres bolsas negras con un cuerpo desmembrado en ellas.
Sobre el cadáver, Los Rojos lanzaron una advertencia en una cartulina y afirmaron que Noé Reynoso y Federico Figueroa están ligados con Guerreros Unidos.
Figueroa es identificado por las autoridades como líder de Guerreros Unidos en Morelos y es hermano del cantautor Joan Sebastian.
En tanto, Reynoso, conocido como «La Yegua», es el actual Alcalde de Amacuzac por el Partido Verde.
‘Estamos en medio de Iguala y Tlatlaya’
La colusión de policías con criminales hubiera estallado en Morelos de la misma forma que en Iguala, Guerrero, señaló Alberto Capella, Comisionado de Seguridad Pública en la entidad.
«Nos adelantamos a esa situación, advertimos que había ese riesgo en el Estado; ese fenómeno de impunidad, del control del crimen organizado en los espacios políticos y de candidaturas partidistas», expuso.
«De no haber generado el control real de las Policías, eso nos hubiera pasado en Amacuzac, Puente de Ixtla, Tetecala y en algún otro municipio, pues Morelos está en medio de Iguala y Tlatlaya».
La diferencia entre un Mando Único y otro, explicó el funcionario estatal, es que el Gobernador asuma su plena responsabilidad en las tareas de seguridad.
«Se necesita de un Gobernador que esté todos los días metido en el tema, que esté metido en el espacio territorial. Nosotros hemos generado ese control, ‘Guerreros Unidos’ y ‘Los Rojos’ que operan en Guerrero, también operan en Morelos; los hemos estado combatiendo, son los que han generado secuestros, homicidios, etcétera», abundó Capella.
Para el ex jefe de la Policía de Tijuana, en materia de seguridad hay contrastes entre los Gobiernos de Guerrero y Morelos.
«La diferencia tiene que ver con la voluntad política de quien gobierna, la ausencia de una voluntad política con una real, y la voluntad política va generando las transformaciones institucionales para llegar al punto en el que estamos», destacó.
«Guerrero cuenta con 10 veces más presupuesto que Morelos, pero no tiene un C5».
De acuerdo con datos oficiales, en Morelos existen mil 700 policías estatales y 4 mil 300 municipales, de los cuales 25 por ciento aprobó los exámenes de control y confianza, y mejoró su capacitación.
«El 75 por ciento no tiene formación policial, el 55 por ciento sólo cuenta con secundaria y más del 90 por ciento no sabe ni manejar una patrulla. Tenemos un promedio de 200 accidentes por año de choques de patrulla», estableció el jefe policiaco.
«Que en ellos recaiga el combate al crimen es una mentira».
No obstante, esos oficiales permanecen en las corporaciones municipales debido a sus contratos laborales.
Capella aseguró que esos policías trabajan con una lógica distinta.
«A los que recibimos los obligamos a hacer su trabajo. Ya los certificamos en control y confianza, eliminamos a los corruptos y obligamos a quien se quiera quedar a capacitarse para ejercer esa función», expuso.
De ese 75 por ciento no apto, detalló, ya se ha capacitado un 10 por ciento, y en 2015 será adiestrado otro 80 por ciento y el 10 por ciento restante, en 2016.
«Buscamos a policías con valores éticos, no sólo capacitados. El adiestramiento no es todo, porque en algún momento va a llegar un buen postor y todo lo que se invirtió en ese policía se va a ir al otro lado, asunto que no pasaría si ese elemento tuviera valores», añadió Capella.