REFORMA / Redacción
Cd. de México (20 junio 2014).- Considerado por las «autoridades» federales como el líder máximo del Cártel del Golfo, Juan Manuel Rodríguez, detenido el martes en Reynosa, era funcionario municipal de Río Bravo, Tamaulipas.
Rodríguez, uno de los objetivos prioritarios del Operativo Tamaulipas, aparecía hasta ayer al mediodía en el directorio del portal del Ayuntamiento como director de Compras y Adquisiciones, cargo que ocupaba desde octubre de 2013.
Alrededor de las 16:00 horas, el directorio municipal ya no apareció en la página web.
Aunque las autoridades federales señalaron el miércoles, al dar a conocer la captura, que la detención de Rodríguez se logró por trabajo de inteligencia, fuentes aseguraron ayer que el capo se desplazaba en la frontera de Tamaulipas, especialmente entre Reynosa y Río Bravo, sin ser molestado.
El Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido, dijo que Rodríguez era el delincuente de mayor rango del Cártel del Golfo en Tamaulipas y con influencia en Nuevo León.
También reveló que era el padre de Juan Manuel Rodríguez García, «Juan Perros», ex número dos de esta organización que fue detenido el 25 de mayo en el municipio de San Pedro.
Testimonios de funcionarios y ex empleados de Río Bravo aseguraron ayer que Rodríguez, más que líder del Cártel del Golfo era el principal asesor de su hijo «Juan Perros».
Los informantes señalaron que «Juan Perros», quien se desempeñaba como jefe de sicarios de «Los Metros», principal célula del Cártel del Golfo, asumió el mando de este grupo tras el arresto en agosto pasado de Mario Armando Ramírez Treviño, «X-20» o «Mario Pelón».
Después de la detención de su hijo, detallaron las fuentes, Rodríguez desapareció del Ayuntamiento, pero seguía dando órdenes desde una oficina alterna que instaló en Reynosa.
Aunque se buscó su versión, el Alcalde de Río Bravo, el priista Rogelio Villaseñor, no atendió las llamadas.