México, 12 de junio 2018 (NOTIGODÍNEZ).- ¿Qué celebra este corrupto individuo? Claro, su impunidad garantizada.
Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) de 2012 a 2015, habría sido visto en una reunión de exalumnos de la Universidad de Harvard realizada hace algunos días, contento, desparpajado y sin la menor preocupación por su implicación en las monstruosas corruptelas de la empresa Odebrecht en nuestro país.
De acuerdo con el columnista Enrique Galván Ochoa, colaborador del diario La Jornada, a la reunión también asistió Carlos Salinas de Gortari, exusurpador de la Presidencia en el periodo 1988-1994 y exalumno de la mencionada universidad extranjera.
Lozoya, señalado por haber recibido 10 MILLONES DE DÓLARES de la constructora brasileña cuando formaba parte del equipo de campaña de Enrique Peña Nieto, acudió a dicha reunión sin asomo alguno de preocupación debido a que, sabe perfectamente, no se le investiga por ese escándalo de corrupción.
Hace un par de días, el diario estadounidense The New York Times reveló testimonios que confirman lo obvio: el régimen usurpador de Peña Nieto no se está investigando a sí mismo por sus corruptelas con Odrebrecht y, menos aún, se castigará a sí mismo.
Tres personas no identificadas habrían declarado al diario que el régimen peñista entorpece deliberadamente las «investigaciones» del caso para no afectar al Partido Revolucionario Institucional (PRI), grupo que actualmente usurpa el Ejecutivo, de cara a las elecciones del próximo 1 de julio.
Asimismo, los testimonios confirman que Odebrecht pagó millones de dólares en sobornos a «funcionarios » de Pemex, a través de cuentas en paraísos fiscales, para garantizar contratos de infraestructura.
Existe evidencia sobre el pago de estas «propinas», como le llamaba Odebrecht a los sobornos, para hundir a los funcionarios involucrados, empezando por Lozoya, pero el régimen no ha actuado para no afectar aún más la imagen de su candidato oficial, José Antonio Meade Kuribreña, anquilosado en el tercer lugar de las preferencias electorales y muy lejos del puntero -por 4 a 1-, Andrés Manuel López Obrador.
Más aún, la participación directa de Lozoya Austin al recibir sobornos millonarios poco antes de arrancar las campañas electorales, alcanzaría al propio usurpador Peña Nieto.
México es el único país del mundo en el que ningún funcionario involucrado en la corrupción de la empresa brasileña, ha sido procesado o, por lo menos, llamado a cuentas ante la justicia.
Con información de La Jornada. Imagen de archivo tomada de Internet
