México, 4 de junio 2018 (NOTIGODÍNEZ).- Otro legado del genocida Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, quien se robó la Presidencia en 2006 y durante su negro y criminal espuriato, hundió a México en un lodazal de corrupción sin precedentes. Recordemos, por ejemplo, que fue Calderón quien abrió las puertas de México a la corruptaza constructora brasileña Odebrecht.
En su edición 2170 publicada el pasado fin de semana, la revista Proceso reveló que el contrato que obliga a Petróleos Mexicanos (Pemex) a proveer etano a bajo costo a una filial de Odebrecht, fue avalado en 2011 ni menos que por José Antonio Meade Kuribreña, entonces Secretario de Energía del calderonato y actualmente candidato presidencial de la coalición «Todos por México» (PRI-PVEM-PANAL).
Según el citado medio, Meade fue advertido por al menos tres consejeros sobre las desastrosas consecuencias de avalar el acuerdo que obliga a Pemex a comprar gas etano al extranjero y revenderlo a Braskem, filial de Odebrecht, a un costo mucho menor. Sin embargo, el entonces secretario de Energía ignoró las advertencias y dio su aval para que la petrolera, dirigida entonces por el panista Jordy Herrera, firmara el contrato.
Desde entonces y durante los próximos 18 años, Pemex está obligada -so pena de pagar multas millonarias- a importar etano y otros insumos para entregarlos a Braskem con descuentos de entre 20 y 30 por ciento. Tan sólo en los 10 primeros meses de entrada en vigor de ese contrato, los mexicanos hemos perdido cerca de 2 MIL MILLONES DE PESOS, mientras que las procesadoras nacionales se han quedado sin etano pese a operar con alta rentabilidad.
Entonces, como ahora, todas las decisiones del consejo de administración de Pemex se realizan con aval del Secretario de Energía. Meade llevaba cuatro meses en el cargo cuando se le advirtió que debía suspender el proyecto para que fuera discutido a profundidad por el consejo de administración de la petrolera mexicana.
Los consejeros Héctor Moreira Rodríguez y Rogelio Gasca Neri presentaron las alertas durante la sesión del 29 de abril de 2011, cinco años antes de que arrancara el proyecto Etileno XXI –en consorcio con Pemex Gas y Petroquímica Básica (PPQ), Braskem y Grupo Ildesa. Sin embargo, Meade ignoró los comentarios y argumentó que el contrato entre PPQ y Braskem «se había cumplido a cabalidad».
Tambien se denunció que dicho contrato había sido firmado a espaldas del Comité de Estrategia e Inversiones, órgano de Pemex encargado de emitir directrices, prioridades y políticas públicas en la empresa. En su informe, el CEI pedía al consejo de administración suspender y revisar dicho contrato para valorar su viabilidad. No obstante Meade se negó.
De esta manera, el espuriato de Calderón concretó legalmente el acuerdo con la filial de Odebrecht y fue el actual usurpador Enrique Peña Nieto, el 6 de enero de 2016, quien expidió el decreto para oficializar el arancel -descuento- sobre las importaciones del etano que Pemex suminstraría al proyecto Etileno XXI, concretamente a Braskem.
Además de surtir el etano, lo que hasta ahora ha representado un gasto de 4 MIL 550 MILLONES DE PESOS para beneficio de la empresa Saudi Arabian Basic Industries Corporation (SABIC), Pemex se comprometió a asumir los costos de transporte del insumo, desarrollando para ello una red de ductos de 226 kilómetros en la que gastó más de 6 MIL 110 MILLONES DE PESOS. También arrendó un buque para completar trasladar el suministro.
Mientras la criminal empresa Odebrecht -sancionada en todo el mundo por sus corruptelas- obtiene beneficios millonarios con este acuerdo leonino, Pemex ha reportado pérdidas que ascienden a MIL 935 MILLONES DE PESOS y contando.
Con información de Proceso