Carolina Gómez Mena
La Jornada
México, DF. Diversas organizaciones aglutinadas en Comunidades para la Justicia y la Paz emitieron un “pronunciamiento creyente” en el que exigieron justicia para los casos de los 43 normalistas desaparecidos, el “derecho a la verdad de las personas víctimas directas o indirectas, como son los padres y madres de familia”.
Protesta durante el Buen Fin en un centro comercial. Foto Alfredo Domínguez
También hicieron un “llamado urgente a las autoridades para que antepongan el bien de las y los ciudadanos sobre cualquier otro interés político, comprometiéndose a estar de parte de las víctimas, respetando y cumpliendo con responsabilidad los compromisos acordados con los familiares de los estudiantes” y “exigimos al Estado mexicano que localice a los 43 estudiantes desaparecidos, con la colaboración de observadores internacionales y que ofrezca resultados fehacientes que favorezcan la credibilidad”.
En el escrito signado por más de 300 agrupaciones como Católicas por el Derecho a Decidir, Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, Centro de Estudios Ecuménicos (CEE) y Centro de Estudios Sociales y Culturales Antonio de Montesinos, así como personas en lo individual,. hoy indicaron que “la desaparición forzada de 43 jóvenes y el asesinato de 6 personas más, han despertado la indignación de la sociedad en general”.
Indican que estos “crímenes engrosan más la dolorosa e indignante lista de víctimas en Guerrero y de los más de 22 mil desaparecidos en el país, sin contar a los miles de migrantes, de quienes no tenemos información de su paradero”.
Refirieron que lo anterior permite constatar que esta “realidad, más allá de ser un caso aislado, se ha vuelto una práctica estructural denigrante”, por lo cual, hombres y mujeres creyentes de diversas tradiciones religiosas, comunidades de fe y sociedad en general “nos hemos solidarizado con las familias de los normalistas desaparecidos y hemos expresado de modo pacífico nuestra indignación”.
Precisaron que entre las “manifestaciones de solidaridad vivimos 43 horas de ayuno y oración ecuménica e interreligiosa, clamando al Dios de la vida, de la justicia y de la verdad por el dolor, la paciencia-activa y la angustia que embarga a las familias y a la comunidad educativa y exigiendo junto a ellas el retorno con vida de los 43 jóvenes”.
También firman el manifiesto el Centro de Estudios Teológicos y Humanísticos YOBEL, el Colectivo de Defensores/as de Migrantes y Refugiados y el Colectivo de Teología de la Liberación Pichi Meisegeier.
