Sergio Caballero
Proceso (Foto: Octavio Gómez)
CANCÚN, Q. Roo., (proceso.com.mx).- El expresidente municipal de Benito Juárez (Cancún), Gregorio “Greg” Sánchez aseguró que el predio campestre que adquirió en la provincia de Entre Ríos, Argentina, y por el cual ahora esa acusado de lavado de dinero en ese país, fue comprado de manera lícita y acusó que hay “una mano muy poderosa”, detrás de estas acusaciones.
En entrevista con Proceso, el exedil señaló que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) de Argentina, actuó “como Pancho Villa”, pues presentó la denuncia en su contra, sin haber reunido la información sobre esta operación de compra-venta.
Y detalló: “Yo no he adquirido ningún terreno en Argentina, fue mi familia, pues tenemos negocios inmobiliarios en varios países, y se pagó con cheque de caja nominativo a la empresa vendedora. Y se demostró con documentación oficial el origen lícito del dinero. Ya que es obligatorio para todos los países de sur América por la ley de lavado de dinero.
“Pero la autoridad fiscal hizo la denuncia sin pedir ninguna documentación, ni notificar se le exhibiera documentación a las partes.
“Pues se estaba en el plazo legal para que en notario informará a la autoridad fiscal. Cómo dijo Pancho Villa, tu dispara y después ‘veriguas’. Por lo cual parece que es un asunto político y con una mano poderosa detrás”.
La AFIP de Argentina denunció a Sánchez Martínez el pasado martes ante el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional, de Posadas, Misiones, por lavado de dinero y evasión fiscal en Argentina por la compra en dos millones de dólares (pagados en efectivo) de un predio campestre en la provincia de Entre Ríos, ubicada a unos 170 kilómetros de Buenos Aires.
La AFIP estableció que la operación de compra-venta del terreno “no fue bancarizada” y que el campo tiene 930 hectáreas y cuenta con una lujosa vivienda a la que sólo se accede por el río o con vehículos 4×4 especialmente adaptados.
Sin embargo, Sánchez Martínez sostuvo que, con esta denuncia, es víctima de una “campaña pagada y orquestada”.
“Sólo con una campaña, pagada y orquestada pueden alguien mandar boletines armados a todos los medios de comunicación. Varios amigos de medios nacionales me reenviaron el boletín armado que les enviaron para publicación”.
Sin precisar el lugar, señaló que radica en el extranjero: “Tenemos negocios en varios países y estamos atendiéndolos donde se encuentran”.
Por otra parte, señaló que no ha sido notificado de alguna nueva denuncia en su contra en el estado de Quintana Roo, donde fue alcalde de Cancún de 2008 a 2010.
Y rechazó buscar en los próximos comicios federales o locales ser candidato de nuevo.
Nacido en Tecpan de Galeana, Guerrero, el 18 de marzo de 1963, y con residencia previa en Chiapas, donde fue empresario maderero, Sánchez Martínez llegó a Cancún en 1993.
Empresario inmobiliario y cantante grupero, incursionó en la política en las elecciones federales de 2006 como candidato a senador de la segunda fórmula de la alianza entre el PRD, PT y el partido Convergencia, hoy Movimiento Ciudadano.
Esta alianza quedó en segundo lugar y solo llegó al Senado la primera fórmula, que encabezó José Luis García Zalvidea, hermano del exalcalde de Cancún Juan Ignacio García Zalvidea.
En los comicios locales de 2008 se convirtió en presidente municipal de Benito Juárez, también por una alianza entre el PRD, PT y Convergencia y fue desairado por el PAN.
Para las elecciones locales de 2010, se postuló como candidato a gobernador, también por los tres partidos de izquierda.
En estos comicios, el PAN postuló a Alicia Ricalde como candidata a gobernadora, que ese partido, sí se coaligó con el PRD, PT y Movimiento Ciudadano, en las elecciones de ayuntamientos y diputados locales.
Pero, en plena campaña, el 25 de mayo de 2010 Sánchez Martínez fue detenido en el aeropuerto internacional de Cancún, acusado de lavo de dinero.
Sin embargo, un año y dos meses después fue absuelto y regresó a Cancún, en donde tuvo un recibimiento apoteótico en el aeropuerto de esta ciudad.
Durante este proceso penal, su esposa Niurka Sáliva, de origen cubano, fue acusada también de tráfico de personas procedentes de ese país, pero huyó de México y se refugió en Argentina.
Para los comicios federales de 2012, se inscribió como candidato a senador de la alianza del PRD, PT y Movimiento Ciudadano y fue incluso respaldado por el abanderado la presidencia de esa alianza, Andrés Manuel López Obrador.
Pero, el 26 de marzo de 2006, súbitamente Sánchez Martínez renunció a la candidatura de esta alianza de izquierda, a pesar que las encuestas lo colocaban por arriba de los abanderados del PRI y PVEM, Jorge Emilio González Martínez y el exgobernador Félix González Canto.
En el marco de este proceso electoral, Sánchez Martínez también enfrentó señalamientos de desvío de recursos durante su gestión como presidente municipal, pero estas acusaciones desaparecieron tras retirarse de la contienda electoral federal.
No obstante, regresó a la escena política en las elecciones locales de 2013, pero para combatir la alianza del PRD y el PAN, a pesar de que este frente ganó en 2010 cinco de los 10 municipios de la entidad.
Finalmente, Sánchez Martínez se separó del PRD y fue candidato del PT a diputado local, tanto por los principios de mayoría relativa, como de representación proporcional, pero no alcanzó a llegar al Congreso del estado.
Tras el proceso electoral local de 2013, Sánchez Martínez desapreció de la escena pública del estado.