Ezequiel Flores Contreras
Proceso
CHILPANCINGO, Gro. (apro).- El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y el procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, se reunieron con los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos y les informaron que siguen abiertas las líneas de investigación del caso.
Además, los funcionarios federales se comprometieron a firmar el convenio para que un equipo técnico de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) coadyuve en la búsqueda de los estudiantes.
Asimismo, continuar la búsqueda de los normalistas y establecer una comisión mixta de información que será encabezada por el director de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, Tomás Zerón, y el comisionado de la Policía Federal (PF), Enrique Cevallos, con el propósito de evaluar la investigación en marcha.
Lo anterior, durante una reunión privada llevada a cabo en el hangar del gobierno estatal que se ubica en la aeropista de esta capital, donde aparte de Osorio Chong y Murillo Karam, estuvo el comisionado de Seguridad Nacional, Monte Alejandro Rubido, y la subsecretaria de Derechos Humanos de Segob, Lía Limón.
Entre los acuerdos también destaca el compromiso de las autoridades federales de otorgar las facilidades para que los peritos argentinos continúen con los trabajos de identificación de los restos encontrados en el basurero de Cocula, donde la PGR resaltó que tenía indicios de que en ese sitio los jóvenes habrían sido asesinados, calcinados sus restos y luego arrojados éstos al río en bolsas de basura.
A pesar de que no hay avances en la investigación, los padres de las víctimas expresaron su satisfacción por los resultados emitidos por los peritos argentinos, quienes determinaron que los restos humanos recuperados en las primeras fosas encontradas en Iguala no corresponden a los normalistas.
Este hecho reafirmó su esperanza de que los estudiantes se encuentren con vida, indicó el vocero de los padres, Felipe de la Cruz, al término del encuentro con autoridades federales.
La reunión con funcionarios federales comenzó a las 16:30 y concluyó dos horas después, en un ambiente de crispación social luego de que este día miembros del magisterio disidente incendiaron la sede estatal del PRI y se enfrentaron con policías al sur de la capital guerrerense.
