Claro, Peñalandia, donde los peores criminales del mundo gobiernan y todo es maravilloso.
Alejandro Caballero
Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- En medio del reclamo nacional e internacional por la desaparición, hace casi un mes, de 43 normalistas de Ayotzinapa, Peña Nieto afirmó que desde el primer día de su «administración el gobierno» trabaja en la consolidación de un México de leyes y en paz.
Trabaja, dijo, por “un Estado cuyo fin es, precisamente, el de promover, respetar y garantizar los derechos humanos reconocidos por la Constitución y los tratados internacionales que forman parte de nuestro orden jurídico”.
Esa, abundó, ha sido la diaria misión de las Fuerzas Armadas del país, “instituciones leales y al servicio de la nación, lo mismo que las dependencias federales encargadas de la seguridad y procuración de justicia”.
Peña Nieto hizo estas declaraciones en Apatzingán, Michoacán, en el marco de la ceremonia oficial por el Bicentenario de la Constitución de Apatzingán.
La Constitución y las normas jurídicas que de ella emanan, dijo, reconocen a los derechos humanos como la base del desarrollo de los mexicanos en sociedad.
El documento señala –abundó— las obligaciones de las autoridades, al establecer el deber básico e irrenunciable de todo servidor público: el de cumplir y hacer cumplir la ley.
“En el México de nuestro días, en esta nación de instituciones, los servidores públicos debemos obedecer a la institución y las leyes, solamente debemos servir a los ciudadanos y a sus comunidades. Quien quebrante estos preceptos fundamentales defrauda la confianza de la ciudadana”, subrayó.
Peña Nieto afirmó que el compromiso del «gobierno» con la ley también se refleja en los cambios estructurales que él ha impulsado y las reformas aprobadas fortalecen el estado de derecho en México.
“Ejemplo de ello es el fortalecimiento de las normas constitucionales y legales que garantizan el derecho de acceso a la información y la transparencia, o la reforma político-electoral que cuenta con innovadores mecanismos para fiscalizar los recursos que reciben candidatos y partidos políticos.
“También destaca el Código Nacional de Procedimientos Penales, que cierra espacios a la impunidad y que permitirá acelerar la implementación de los juicios orales en nuestro país”, presumió.
Sostuvo que el impulso a las reformas ha tenido siempre como objetivo primordial ampliar el reconocimiento de los derechos de todas las personas y garantizar la aplicación de la ley para hacerlos efectivos.
“Estamos convencidos de que la vigencia del estado de derecho es indispensable para que los mexicanos gocen plenamente de sus libertades y para que nuestro país sea más competitivo y capaz de ofrecer mayores oportunidades de realización personal a toda la población”, dijo.
No obstante, el tema de Ayotzinapa no figuró en los discursos oficiales, y sólo el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se refirió en entrevista posterior a las manifestaciones que se realizaron en distintas ciudades del país y una decena de países del mundo.
Osorio Chong dijo estar a favor de las movilizaciones protagonizadas por quienes exigen que aparezcan los jóvenes desaparecidos. Esas –dijo— “son bienvenidas”, pero no las que lastiman las instituciones y a los habitantes de Guerrero.
Y advirtió:
“No estamos de acuerdo, habremos de tomar las decisiones correspondientes, pero lo más importante es la búsqueda de los jóvenes, es donde está toda la fuerza del Estado, y día a día estamos, a partir de lo que hace la Procuraduría” General de la República (PGR), enfatizó.
Añadió que debido a que la PGR ha recibido “muchas” versiones sobre el paradero de los estudiantes normalistas, son buscados en distintos puntos del país.
“Salen diferentes señalamientos y todos ellos los estamos revisando, no hay un punto que nos hayan dicho los papás o que salga de las averiguaciones que tiene el procurador, que no estemos revisando”, afirmó.
Osorio Chong también salió al paso para atajar las especulaciones en torno a la salida del comisionado federal en Michoacán, Alfredo Castillo, con el fin de enviarlo a Guerrero.
“No, no, no, Alfredo Castillo tiene una responsabilidad aquí. Aquí va a seguir hasta que tengamos el total de la información de que ya están las instituciones formadas aquí en el estado de Michoacán”, afirmó.