Aquí pueden seguir robando y delinquiendo a placer, que nadie les tocará un pelo.
Redacción Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- La justicia estadunidense estrechó el cerco legal contra el exgobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores, al acusar a su cuñado Oscar Gómez Guerra de los presuntos delitos de conspiración para lavado de dinero y complicidad para transferir recursos al extranjero sin licencia.
En un comunicado, el procurador federal para el Sureste de Texas, Kenneth Magidson, precisó que el inculpado lavó dinero a nombre del exmandatario tamaulipeco entre 2004 y 2010.
De 42 años, Gómez Guerra está casado con una hermana de Hernández Flores y actualmente se encuentra prófugo.
La acusación fue dada a conocer por un gran jurado federal en Corpus Christi, Texas, luego de una moción interpuesta este viernes por la Oficina del Procurador Federal.
Según la carpeta de cargos, Gómez Guerra conspiró en enero de 2009 lavó dinero y ayudó y promovió la operación de un negocio ilegal de envío de remesas.
Las imputaciones incluyen un aviso de confiscación de una residencia en Austin, Texas, valuada en 2.7 millones de dólares y de una propiedad en McAllen, de medio millón de dólares.
La Oficina del Procurador Federal informó que también se buscara obtener una orden judicial para confiscar otros 10 millones de dólares al acusado.
De ser declarado culpable, Gómez Guerra enfrentaría una pena de hasta 20 años de prisión y una multa de hasta 500 mil dólares, o dos veces el valor de los instrumentos monetarios o fondos involucrados en la transacción o ambos.