México, 19 de julio 2014 (NOTIGODÍNEZ).- Hace unos momentos varios medios han confirmado la muerte de José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo, quien el viernes pasado fue declarado con muerte encefálica por las autoridades hospitalarias donde se encuentra internado.
De acuerdo con La Jornada de Oriente, la propia madre de Luis Alberto autorizó su desconexión de los aparatos que le mantenían con vida pese a que ya no registraba actividad cerebral. La diputada Roxana Luna Porquillo, quien ha estado acompañando a la familia y el resto de los pobladores de Chalchihuapan tras la represión del 9 de julio, confirmó la versión a La Jornada:
De acuerdo con palabras de la legisladora perredista, el menor de 13 años fue desconectado de los aparatos que lo mantenían con vida, luego que médicos del Hospital General del Sur le diagnosticaron “muerte cerebral”.La decisión fue tomada por la madre del niño, Elia Tamayo Montes, quien durante estos últimos días estuvo refugiada fuera de la comunidad de Chalchihuapan, pues funcionarios del gobierno de Rafael Moreno Valle la estuvieron hostigando para que firma una declaración “fabricada” para deslindar a la autoridad de las lesiones a su hijo. Fuente
Por su parte, el diario Reforma ha publicado que la muerte del menor se debió a un paro cardíaco, según lo refiere el propio «gobierno» de Moreno Valle y el director del nosocomio, por lo que no fue necesario desconectarlo:
El Gobierno del Estado mediante un comunicado confirmó la muerte de José Luis Tlehuatle Tamayo esta noche en el Hospital General del Sur. Fuentes cercanas al nosocomio indicaron que el menor falleció a consecuencia de un paro cardiaco, por lo que no hubo necesidad de que lo desconectaran del aparato que lo mantenía con vida. Fuente
Ambas versiones, a la par que chocan entre sí, contradicen lo que hoy mismo por la tarde se dio a conocer sobre la resolución de Elia Tamayo encaminada a solicitar un amparo ante el juez de distrito para evitar que los médicos del Hospital General del Sur desconectaran a su hijo del respirador artificial, apelando al «derecho a la vida». El amparo habría incluido una visita de inspección al hospital para documentar las condiciones del internamiento, el estado de salud del niño y la redacción de un reporte detallado por parte de los galenos a cargo del paciente. Elia Tamayo declaró que desconfiaba del parte médico oficial y en retieradas ocasiones pidió apoyo para obtener una segunda opinión.
José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo, de 13 años de edad, fue herido en la cabeza por un proyectil que dispararon granaderos estatales durante la dispersión de un bloqueo en la autopista Puebla-Atlixco realizado por pobladores de San Bernardino Chalchihuapan el pasado miércoles 9 de julio. Los habitantes protestaban por la desaparición del Registro Civil comunitario ordenada por el «gobernador» Rafael Moreno Valle. Ni Luis Alberto, hoy fallecido, ni su madre participaban en el conflicto. Ambos iban de regreso de la escuela secundaria donde el niño estudiaba, a un costado de la carretera, cuando fue alcanzado por una bala de goma. Tras diez días de permanecer internado y de un total hermetismo sobre su estado de salud por parte de las «autoridades», hasta ayer viernes le fue declarada oficialmente la muerte cerebral.
