Andrea Becerril
La Jornada
México, DF. En poco más de dos horas, las comisiones de Energía y de Estudios Legislativos aprobaron en lo general y lo particular concluyeron la votación de los cuatro dictámenes en los que se aglutinan las 17 leyes secundarias de la reforma energética, con más de 250 cambios propuestos por el PAN, que en su mayoría no se debatieron.
PRI, PAN y Verde avalaron las modificaciones, en la que se trató de suavizar los ordenamientos que permiten del despojo de tierras a pueblos y comunidades indígenas, a través del cambio de la palabra expropiación, por el de ocupación temporal, pero también otros cambios, que adelantan para el 2016 la entrada de gasolineras extranjeras al país y la importación de gasolina y avanzan a la eliminación de los subsidios generalizados al consumo de energía eléctrica.
Ya sin el PRD y PT, que abandonaron la sesión antes de que se comenzara a votar, la mayoría PRI PAN aprobó las cerca de 250 reservas presentadas por los panistas, -y negociadas antes con el gobierno federal- sin debate alguno. La mayoría sólo fueron enunciadas de forma general, excepto las más relevantes, entre ellas la eliminación de la palabra expropiación, que se sustituyó por la de “ocupación temporal de predios”.
“El PAN no iba a permitir que los campesinos fueran abusados por los contratistas, por empresas petroleras o gaseras”, sostuvo durante la reunión el panista Salvador Vega Casillas. Sostuvo que el PAN “no señaló, sin embargo, que en la Ley de Hidrocarburos se mantiene la posibilidad de obligar a ejidatarios, comuneros y productores privados a entregar sus tierras y bosques a trasnacionales, a través de la figura de “servidumbre legal”, tanto de hidrocarburos como de energía eléctrica.
Por lo que se refiere a las indemnizaciones a los afectados, el PAN propone modificar la ley de hidrocarburos a fin de establecer distintas modalidades entre las que se encuentran el pago directo de afectaciones a bienes o derechos, la renta por concepto de ocupación, servidumbre o uso de la tierra y un porcentaje de las utilidades obtenidas por la empresa en el caso de las extracción comercial de hidrocarburos.
Vega Casillas sostuvo que bajo ese modelo, “los campesinos y los propietarios de la tierra serán enormemente beneficiados por toda la riqueza que encuentren en sus propiedades”.
Sin embargo, no se fija ningún porcentaje de la ganancia a repartir y se le deja a la Secretaría de Energía “elaborar las metodologías, parámetros y lineamientos que podrán servir de referencia para determinar el porcentaje”.
La propuesta del PAN que fue aprobada incluye la aclaración de que ese porcentaje que las trasnacionales otorgarían por la apropiación de las tierras no deberá “inhibir la competitividad ni representar una carga desproporcionada a las actividades” de la petrolera extranjera.
Asimismo mantiene la posibilidad de que a cambio de su tierra los ejidatarios, comuneros o particulares puedan ser contratados por el contratista, al igual que familiares o miembros de la comunidad en que se establezca la explotación de petróleo o gas.
Se precisó además en el articulado que no se podrá pagar a los afectados con parte de la producción de hidrocarburos, ya que éstos, “son propiedad de la nación”.
Se suavizaron parte de las disposiciones y establece que “el ejido, los ejidatarios, comunidades o comuneros podrán solicitar la asesoría y, en su caso, representación de la procuraduría agraria”, en las negociaciones que llevan a cabo con las trasnacionales.
Vega Casillas recalcó que las iniciativas de Peña Nieto a una reforma, que es modelo propuesto por el PAN, sufrieron más de 500 cambios .
Ya con los dictámenes la Comisión Permanente citará mañana a un periodo extraordinario en el Senado, que comenzará el jueves.
