Enrique Méndez
La Jornada
México, DF. Los grupos parlamentarios del PRI y PRD en la Cámara de Diputados consideraron que si Andrés Manuel López Obrador tiene información sobre los presuntos nexos del alcalde prófugo de Iguala, José Luis Abarca, con el crimen organizado en la región, debería aportarlo a las autoridades que integran las averiguaciones previas relacionadas con la desaparición de 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa.
Los coordinadores de esas bancadas, Manlio Fabio Beltrones y Miguel Alonso Raya, consideraron necesario que todo aquél que posea información sobre las relaciones de Abarca con delincuentes deben presentarse ante la Procuraduría General de la República (PGR).
Alonso Raya resaltó que la responsabilidad de haber postulado al alcalde prófugo de Iguala no es exclusiva del PRD, sino también de Movimiento Ciudadano y del Partido del Trabajo que lo postularon en coalición, y que no sólo tenían derecho a registrarlo sino también a vetarlo.
Cuestionado sobre qué influyó para la nominación de José Luis Abarca como candidato a edil, el coordinador perredista planteó que en ese momento la titular de la cartera de asuntos electorales del partido es la actual diputada federal perredista, Socorro Ceseñas Chapa.
Además, sostuvo que todos quienes tienen información sobre el crecimiento de la delincuencia en ese municipio deben aportar información “empezando por el 27 batallón de infantería que se encuentra en Iguala, funcionarios de la PGR y del Cisen, así como de Gobernación que cuenta con mapas de riesgo de cada uno de los municipios del país. También el alcalde de Cocula (César Miguel Peñaloza Santana), quien es militante del PRI”. Esto porque ahora se sabe los policías municipales de Iguala entregaron a los de Cocula a los estudiantes de Ayotzinapa.
Incluso resaltó que una línea de investigación debe apuntar al exgobernador de Guerrero, Rubén Figueroa Alcocer, quien debió renunciar a su cargo en 1996 tras la masacre de Aguas Blancas.
“Todos saben el coraje y hasta la venganza que planeó Rubén Figueroa. Todo mundo sabe que Vicario Castrejón, vinculado a Figueroa, apadrinó a una generación de Ayotzinapa. Él les construyó un monumento a Lucio Cabañas. ¿No merece investigarse esta relación tan cercana, por qué tanto cariño hacia la normal?”, preguntó Alonso Raya.
Respecto del deslinde que emitió el domingo López Obrador, Alonso Raya sostuvo que el ex candidato presidencial y actual dirigente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) “no puede eximirse de la responsabilidad que le corresponde”.
Antes, Beltrones refirió que hay información periodística respecto de que López Obrador fue apercibido directamente por un legislador guerrerense sobre las relaciones de Abarca con el crimen organizado. “Eso es inocultable y si de todas maneras hubo apoyo, es necesario informar por qué no se hizo caso y si tiene mayor información que la provea a las autoridades, igual en el caso de Lázaro Masón, ex secretario de salud de gobierno de Guerrero, y quien habría sido el principal impulsor de la candidatura del ex alcalde de Iguala, señalado junto con su esposa por la PGR de ser el autor intelectual del asesinato y desaparición de los normalistas”.
Por su parte, el coordinador de Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal Ávila, sostuvo que “los más grandes ladrones de cuello blanco del país, César Camacho Quiroz (presidente nacional del PRI) y Emilio Gamboa Patrón (coordinador de los senadores del PRI)”, ahora responsabilicen a López Obrador de conocer los antecedentes de José Luis Abarca.
Monreal Ávila afirmó que quien sí sabía de las actividades presuntamente ilícitas de Abarca fueron el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y la PGR, “y no hicieron nada”.
