Luis Carriles
El Economista (Foto: Campesinos de Atenco dicen que no entregarán sus tierras para el aeropuerto. Foto Jesús Villaseca / La Jornada)
Atenco, Edomex. En el último año los 13 comisariados ejidales que estarían afectados por la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, y que están en los municipios de Texcoco y Atenco, promovieron el cambio de tierras ejidales a dominio pleno, de tal forma que cada posesionario ejidal pudiera hacer una negociación para la venta de sus tierras.
Las compras que ha hecho el gobierno federal y el gobierno estatal fijaron el precio de cada hectárea en 1.5 millones de pesos, revelaron agricultores del ejido Ixtapa, quienes vendieron tierras improductivas en una zona conocida como El Salado.
Añadieron que las negociaciones y el precio se fueron planteando a partir de este año y las asambleas ejidales tomaron este tipo de decisiones que fueron válidas ante las autoridades correspondientes, de tal forma que en este momento son irreversibles.
Sin embargo, las tierras que colindarían con el aeropuerto y que son de riego no se han vendido. En caso de que se hiciera algún tipo de negocio el precio sería mayor, por lo menos el doble, debido en gran medida a que serían acuerdos entre privados y no con el gobierno.
Explicaron que los acuerdos se han mantenido en privado como una medida de seguridad, por lo que no se hicieron públicas las listas de quienes vendieron la tierra que sería donada a la federación.
En 2001 este ejido obtuvo un amparo contra la expropiación y evitó, por medio de recursos legales y no en un choque, que el gobierno federal obtuviera sus tierras. Ahora, ya con el dominio pleno sobre los terrenos accedieron a una negociación, donde no sólo se pactaba la venta de la tierra sino la inclusión de los habitantes de la zona en proyectos productivos.
Entre los acuerdos que se han tomado entre los ejidatarios que ya vendieron sus terrenos está el de protección a los mantos acuíferos, modernización de las vías de comunicación y proyectos productivos.
De acuerdo con los ejidatarios, lo que hasta ahora les han explicado los negociadores enviados por el gobierno es que los cambios implementados en el esquema de construcción buscan evitar el choque con los ejidatarios que no accedieron al dominio pleno de la tierra.
EL MEGAPROYECTO
Según los ejidatarios consultados, además del aeropuerto van a llegar nuevos negocios que se querrán asentar en la zona donde actualmente hay actividades agrícolas. El objetivo que se persigue es llegar a una serie de acuerdos con este tipo de empresas, de tal forma que haya beneficios para ambas partes.
Añadieron que buscarán el apoyo de las autoridades federales y estatales para que no sólo el sindicato de transportistas de la zona sea el beneficiario de las obras civiles que se van a hacer, como es la construcción de infraestructura vial o de los hoteles y demás servicios turísticos, por ejemplo, o en el transporte de pasajeros.