México, 8 de agosto 2014 (NOTIGODÍNEZ).- Brutalidad, ignomina y tragedia… los engendros de un sistema decadente que trae como consecuencia la descomposición del tejido social.
Una familia en la colonia Las Cumbres de Reynosa atraviesa momentos desgarradores por la pérdida de una joven que decidió quitarse la vida, agobiada por los «malditos celos» y muchos otros problemas maritales cuyo origen radica en la propia sociedad consumista, enferma y decadente.
Para hacer más grande y dolorosa la tragedia, reporta el diario Media Hora que la joven tenía cuatro meses de embarazo.
La decisión fatal, de acuerdo con el citado rotativo, derivó de una discusión con su esposo por la supuesta existencia de un amante.
El lamentable fallecimiento ocurrió alrededor de las 4:00 horas de ayer y quedó al descubierto una hora más tarde, luego de que el cónyuge de la joven suicida la buscó cerca de la casa en la colonia Las Cumbres.
Ha trascendido que la muchacha sólo tenía 17 años de edad. Su nombre y el de los involucrados no serán dados a conocer en este espacio por respeto a la familia que atraviesa momentos terribles.
Al sitio de la tragedia llegaron, cuando se les dio la gana, elementos de la Policía Federal Ministerial y personal de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado, para deslindar responsabilidades y dar fe del suicidio.
El esposo de la hoy occisa, de 18 años de edad, fue sometido a un intenso interrogatorio por parte de los elementos policiacos.
El joven relató que horas antes del suicidio había discutido fuertemente con su pareja y le reclamó sobre la existencia una tercera persona quien probablemente sería el verdadero progenitor del bebé que ella esperaba. La acusada, sin embargo, negó la existencia del presunto amante. Posteriormente el joven se fue a dormir pero la ofensa no sería olvidada por su esposa. Cuando despertó, presa de la angustia, no la encontró en la cama y la buscó desesperadamente dentro y fuera de su casa.
El joven encontró el cuerpo ya sin vida de su esposa colgado de una viga del techo de madera en una de las habitaciones de la vivienda.
La madre de la adolescente manifestó a los uniformados que su hija le había contado que tenía muchos problemas con su esposo, incluso señaló que era víctima del maltrato intrafamiliar y que habría sido agredida físicamente por su cónyuge con relativa frecuencia.
En una escena desgarradora, según describe el diario aquí citado, los familiares de la jovencita lanzaron insultos contra el esposo de la occisa, lo culpabilizaron y profirieron gritos de “tú tienes la culpa de todo, regrésamela, tú la mataste”, que estremecieron a los agentes policiales presentes en el lugar de los hechos.
El marido, en tanto, alegó en su defensa que era incapaz de hacer algo así, ya que su esposa era todo en su vida y la quería muchísimo.
Al despuntar el amanecer, personal de la Agencia Tercera de Investigación del Ministerio Público ordenó a una unidad del Servicio Médico Forense (Semefo) levantar y trasladar el cuerpo de la madre adolescente a los laboratorios locales para realizar la necropsia de ley y confirmar las causas de su muerte.
La jovencita no dejó el clásico recado póstumo.
Los familiares de la adolescente que tenía 4 meses de embarazo al quitarse la vida, acudieron con el fiscal de la agencia tercera de investigación para reclamar el cuerpo y darle sepultura.