México, 14 de septiembre 2018 (NOTIGODÍNEZ).- Rosario Robles Berlanga, actual «titular» de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) del agonizante régimen usurpador de Enrique Peña Nieto, se dijo «muy tranquila» luego de que el diario Reforma destapara un nuevo escándalo que la involucra en el saqueo de al menos 700 MILLONES DE PESOS, dinero de todos los mexicanos.
Robles, quien fue premiada con altos cargos públicos del actual espuriato tras operar durante las campañas de 2012 en favor de Peña, fue una de las protagonistas centrales de la llamada «estafa maestra», un monstruoso esquema de desvío de recursos millonarios mediante empresas fantasma y la participación de universidades públicas.
Esta semana, Reforma publicó una investigación que revela la existencia de una red para triangular recursos de Sedatu y retirar más de 700 millones de pesos en efectivo, llevándolos en camionetas blindadas a 10 domicilios de la Ciudad de México, Tabasco, Quintana Roo y Sinaloa.
El destino de los recursos se desconoce. El esquema incluyó todo tipo de irregularidades y delitos: desde trámites a medio proceso y uso de credenciales de elector vencidas, hasta suplantación de identidad de personas que nunca supieron que sus nombres estaban siendo utilizados para justificar el desvío de millones del erario. Desde luego no faltaron las empresas fantasma.
Al respecto, Rosario Robles aseguró no tener nada qué ocultar y retó al gobierno entrante de Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de la República, a investigarla «hasta por abajo de las piedras».
“[Estoy] muy tranquila de que va a llegar un nuevo gobierno y que vamos a ver que el nombre de Rosario Robles no tiene por qué estar involucrado en asuntos que son mala información hacia mi persona”, lanzó en conferencia de prensa citada por la Agencia Proceso (Apro).
«En cuatro años nadie, absolutamente nadie, ha sacado una cuenta, una casa, una propiedad que diga ‘Rosario Robles’ más allá de lo que tengo desde antes de entrar en el gobierno”, desafió.
Al ser cuestionada sobre su decisión de mantener intacto a su equipo de trabajo pese a los delitos detectados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), Robles instistió que los servicios cuestionados por la auditoría sí fueron entregados.
«Yo me remito a lo que la ASF ha señalado, a lo que se ha publicado (…) Insisto: los servicios se entregaron. Si hay personas que hayan incurrido en alguna irregularidad, que se castiguen, con nombre y apellido, a la gente que ha sido denunciada ante la PGR.
«Por cierto, yo no estoy en ninguna denuncia, y sin embargo mi nombre aparece porque es el que vende…», fustigó.
Enseguida, derrochando el cinismo que la caracteriza, Rosario Robles se refirió a la amenaza de los diputados del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) de proceder legalmente contra ella, retando al presidente electo López Obrador a «investigarla hasta por abajo de las piedras».
“Entiendo que han dicho que el presidente electo no me perdonará. Yo no pido el perdón de nadie. No tengo absolutamente nada que temer, ni nada que esconder. A mí que se me investigue hasta por debajo de las piedras”, lanzó.
Con información de Proceso