Siguen los fuegos artificiales mientras los verdaderos lavadores de dinero están en la «Secretaría de Hacienda», saqueando a los mexicanos y enriqueciendo a sus jefes los bancos.
Abel Barajas
Reforma
Cd. de México, México (06 enero 2015).- Tras la captura del Alcalde perredista de Iguala, José Luis Abarca, en noviembre, la PGR detuvo el lunes a José Ricardo Gallardo, Edil con licencia de Soledad de Graciano Sánchez, San Luis Potosí.
Gallardo, quien aspiraba a la candidatura del PRD a la Gubernatura, es acusado de desviar y lavar para su beneficio más de 200 millones de pesos del erario y de la delincuencia organizada.
Policías de su Municipio, vecino a la capital potosina y el segundo con más habitantes en el Estado, trataron de impedir su captura. Ayer fue recluido en el Penal Federal de Hermosillo.
Tomás Zerón, jefe de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la PGR, reveló anoche que de octubre de 2012 a agosto de 2014 se detectaron transferencias ilegales desde las cuentas de la Alcaldía por más de 200 millones de pesos.
La mayor parte del dinero fue triangulado, a través de una compañía de servicios médicos, a diversas empresas propiedad del Edil, sus familiares y amigos.
«Gallardo es accionista en empresas ubicadas fuera del territorio nacional, específicamente en Estados Unidos, mismas que están siendo investigadas para determinar si también eran receptoras de dinero público», dijo Zerón en una breve rueda de prensa.
Agregó que, además, el perredista manifestó en su declaración patrimonial ser dueño de un violín con un valor de 5 millones de pesos.
Tras el protocolo que adoptó el PRD para evitar casos como el de Abarca –implicado en la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa–, la dirigencia solicitó en diciembre a Gallardo comparecer ante la autoridad competente debido a los señalamientos en su contra.