ISRAEL SALGADO URIÓSTEGUI
La Jornada
Iguala, 18 de octubre. Familiares de los 214 policías municipales trasladados a Tlaxcala para recibir adiestramiento militar denunciaron que son investigados y maltratados, y que en grupos de 10 son llevados a declarar a la subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada con relación a los hechos en que seis personas fueron asesinadas y 43 fueron desaparecidos.
Se fueron reuniendo poco a poco hasta exigir a las autoridades municipales información acerca de la situación legal y física de los policías, y luego instalaron un plantón.
El encargado de despacho de la presidencia municipal, Óscar Chávez, y el síndico procurador Mario Castrejón se comprometieron a entrevistarse con el coronel José Rodríguez Pérez para luego darles la información que estaban pidiendo.
“Desde el momento en que se los llevaron no cumplieron, y los queremos de regreso”, puntualizaron las esposas inconformes.
Un autobús con unos 23 policías preventivos, agentes de tránsito y personal administrativo que se habían ido a adiestrar a un campo militar de Tlaxcala llegó a Iguala alrededor de las 4 de la mañana. Son los primeros que, tras la deserción, se quedarán sin empleo al no haber logrado la acreditación que exige el mando único.
La policía Graciela, de unos 60 años, quien estaba comisionada en el parque del DIF y decidió adiestrarse, llegó a Iguala alrededor de las 4 de la mañana con otros 22 agentes, todos ellos se regresaron por enfermedad. Los regresaron porque allá no hay medicamentos, no los están atendiendo, dijo.