Tampoco dice cuánto costará y quiénes de sus amigos empresarios se beneficiarán con estas concesiones millonarias, a costa del erario capitalino.
Óscar del Valle
Reforma
Avenida Chapultepec y calles de la Zona Rosa formarán un corredor peatonal y cultural que compartirá espacios con ciclistas, automovilistas y transporte público.
El «Gobierno» del DF (GDF) anuncia, a través de la Gaceta Oficial, la declaratoria de necesidad para otorgar la concesión para el uso, aprovechamiento y explotación de la vialidad desde su cruce con Lieja hasta la Glorieta de Insurgentes y vías aledañas.
El proyecto pretende impulsar la vocación cultural de la Zona Rosa como espacio urbano, turístico y de entretenimiento.
«En la Zona Rosa existen diversos espacios públicos y áreas verdes desarticuladas entre sí, por lo que se requiere una intervención urbana que busque la renovación de esta zona.
«Que genere un sistema de espacios abiertos, una sucesión de nodos y recorridos con actividades recreativas y culturales que atraigan y a la vez satisfagan a los diversos grupos de población, den solución a la conectividad y accesibilidad y sobre todo, constituya por sí mismo una atracción para visitantes y residentes, que aumente la calidad en espacio y de vida de la Ciudad», abunda.
Por otra parte, la declaratoria de necesidad también destaca transformar la Avenida Chapultepec, para convertirla en un esquema de Calle Completa en donde convivan con sus espacios definidos ciclistas, peatones, automovilistas y transporte público.
«Actualmente la infraestructura para tránsito de peatones y ciclistas en la zona circundante a la Avenida Chapultepec es insuficiente o está en malas condiciones, además, es necesario adecuar la infraestructura para otorgar accesibilidad universal.
«Por lo que se requiere un proyecto que facilite accesibilidad y conectividad entre las diferentes áreas que circundan la Avenida Chapultepec así como la conexión peatonal y vehicular entre las colonias Juárez y Roma Norte», indica la publicación.
Se presume que para la transformación de la vialidad, el concesionario podrá usar, aprovechar y explotar el bien público, con el fin de administrar, diseñar, acondicionar, y mantener una calle completa con vocación cultural que incluya espacio público, equipamiento, vialidad, estacionamientos e infraestructura subterránea y superficial.
