Redacción / Sinembargo
Ciudad de México, 6 de julio (SinEmbargo).- Aristóteles Sandoval Díaz fue el encargado de «recuperar» para el Partido Revolucionario Institucional (PRI) una entidad que durante 18 años fue gobernada por el Partido Acción Nacional (PAN).
A los 39 años se convirtió en uno de los más jóvenes en tomar el poder en su entidad. Como Alcalde Guadalajara y como dirigente estudiantil su «carisma» fue innegable, lo que le valió la designación el 1 de julio de 2012.
Sus primeros meses no fueron fáciles, no sólo ha tenido que enfrentar el reproche generalizado por no actuar en contra de su antecesor, el panista Emilio González Márquez, sino también la exigencia ciudadana para el cumplimiento inmediato de sus promesas de campaña, protestas por alzas en el trasporte público, la aparición de narcofosas con más de 80 cuerpos en su entidad, así como el asesinato del su primer Secretario de Turismo, José de Jesús Gallegos Álvarez, apenas a 2 días de haber iniciado su gobierno.
Ahora, el joven sujeto se encuentra ante el surgimiento de grupos neonazis en su entidad que buscan, según su manifiesto, “proteger a las familias tradicionales, a la religión católica-cristiana, a los micro, pequeños y medianos empresarios y reescribir la historia por medio del revisionismo”.
El Movimiento Nacionalista Mexicano del Trabajo, que surgió en noviembre de 2013, profesa el “nacionalhumanismo”, busca además abolir la propaganda-adopción-marchas-matrimonios homosexuales.
Aunque el Partido Acción Nacional (PAN) se deslindó de este grupo de jóvenes, algunos de ellos militantes del albiazul, el surgimiento de este tipo de grupos agrava para sus autoridades el problema de intolerancia que vive la entidad.
“Según la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Jalisco se encuentra ya en el top ten de los estados con mayor índice de discriminación”, lamentó en marzo pasado la Legisladora Fabiola Loya Hernández, del Movimiento Ciudadano (MC).
Según la CEDH la entidad ocupa el tercer lugar a nivel nacional en casos de discriminación. El año pasado la entidad recibió 9 mil 345 quejas.
La Comisión Ciudadana de Crímenes por Homofobia señala a Jalisco en cuarto lugar nacional por estos actos; mientras que el Comité de América Latina y del Caribe para la Defensa de los Derechos Humanos de las Mujeres (Cladem AC), también reporta a la entidad entre las primeras cinco con más feminicidios (homicidios en contra de mujeres, por razón de género) que se han disparado 300 por ciento en la última década. Ambos ejemplos son de delitos y a la vez de violaciones al derecho a la vida que podrían revertirse fomentando la tolerancia y la no discriminación; y evitando la impunidad que hoy prevalece en la mayoría de estos asesinatos, según el organismo.
Sandoval Díaz no ha estado ajeno a la controversia por las expresiones o actos de discriminación. El 31 de agosto de 2013, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) emitió un comunicado para “lamentar” las declaraciones del mandatario en contra de los migrantes.
“Estamos revisando que personal o gente, hondureños, o gente, sobre todo de Centroamérica, que está en las esquinas, necesitamos que se denuncie para, inmediatamente, con todas las condiciones y con todos sus derechos, regresarlos a su país”, dijo en una rueda de prensa.
“Lamentó que mis palabras no hayan sido acertadas. En Jalisco no existe política ni intención de perjudicar a los migrantes”, aclaró en un tuit publicado posteriormente.
Hasta ahora, Sandoval no se ha pronunciado por la presencia de este grupo neonazi en la entidad.
Además de garantizar el respeto a las garantías en el estado, tiene en la lista de espera luchar contra la pobreza, desarrollar las 13 regiones del estado, reducir al mínimo la deserción escolar, llevar inversiones a la entidad, conservar los recursos naturales del estado, mejorar los hospitales regionales, garantizar una movilidad eficiente y destinar más recursos a la cultura.